Pegatinas Obligatorias: Dónde Colocarlas Bien

Hay detalles en nuestro día a día que, por pequeños que parezcan, tienen una importancia capital. En el mundo del automóvil, uno de esos detalles son las pegatinas o distintivos que debemos llevar obligatoriamente en nuestro vehículo. No se trata de meros adornos ni de una elección estética, sino de una exigencia normativa que busca garantizar tanto la seguridad vial como el cumplimiento de las regulaciones medioambientales y técnicas. Saber exactamente dónde y cómo colocar estas pegatinas es fundamental para evitar sanciones y, más importante aún, para asegurar una visibilidad adecuada al conducir.

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La obligatoriedad de llevar ciertas etiquetas visibles en el coche no solo implica tenerlas, sino también colocarlas en la posición correcta. El Reglamento General de Vehículos y las normativas de la Dirección General de Tráfico (DGT) especifican lugares concretos para cada distintivo, y desviarse de estas indicaciones puede acarrear consecuencias económicas en forma de multas. Este artículo detallará cuáles son las pegatinas más importantes que debes tener en cuenta, su significado y, sobre todo, cuál es su ubicación precisa tanto en coches como en motocicletas.

Nos centraremos en las dos pegatinas que, con mayor frecuencia, generan dudas sobre su colocación: la etiqueta de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) y el Distintivo Ambiental de la DGT. Ambas cumplen funciones esenciales y su correcta exhibición es verificada por las autoridades. Aprenderás no solo dónde pegarlas, sino también por qué esa ubicación es la designada y qué debes evitar al manipular estos adhesivos.

La ITV es un examen periódico al que deben someterse todos los vehículos para verificar que cumplen las condiciones de seguridad y las normas de emisiones exigidas. Al superar esta inspección, se entrega un informe favorable y una pegatina que certifica que el vehículo es apto para circular durante el periodo establecido. Esta pegatina es una prueba visible para las autoridades de tráfico de que el vehículo ha cumplido con su revisión obligatoria. La única excepción a la obligación de la primera ITV es para los vehículos nuevos, que están exentos durante los primeros cuatro años desde su primera matriculación. Una vez cumplidos los cuatro años, deben pasar la primera inspección, y a partir de ahí, la periodicidad dependerá del tipo de vehículo y su antigüedad (anual, bienal, etc.).

Un detalle interesante y funcional de la pegatina de la ITV es su color. Este no es aleatorio, sino que cambia cada año para facilitar a los agentes de tráfico la rápida identificación de la caducidad de la inspección a distancia. La rotación de colores (verde, amarillo, rojo) sigue un patrón que se repite cada tres años. Conociendo el color de la pegatina, un agente puede tener una pista inicial sobre si la ITV de un vehículo podría estar caducada, aunque siempre confirmará la fecha exacta que aparece en la propia pegatina y en los registros.

• Si la pegatina de la ITV es amarilla, indica que la caducidad de la inspección corresponde a los años que terminan en 3, 6 o 9 (por ejemplo, 2023, 2026, 2029).
• Si la pegatina es roja, la caducidad es en años que terminan en 4, 7 o 0 (por ejemplo, 2024, 2027, 2030).
• Si la pegatina es verde, la caducidad ocurre en años que terminan en 2, 5 o 8 (por ejemplo, 2022, 2025, 2028).

Este sistema cromático es una herramienta eficaz para la vigilancia del tráfico, permitiendo a los agentes identificar rápidamente vehículos cuya ITV podría estar pendiente, simplemente observando el color de la pegatina y el año en curso. Por ejemplo, si en diciembre de 2024 un vehículo lleva una pegatina amarilla, es muy probable que su ITV caducara en 2023 y no haya sido renovada.

Ahora, ¿dónde debe ir exactamente esta importante pegatina? Según lo estipulado en el Reglamento General de Vehículos, la pegatina de la ITV debe colocarse de forma obligatoria en la esquina superior derecha del parabrisas delantero del vehículo. Es fundamental que se pegue por la parte interior del parabrisas, de manera que la cara impresa, con todos los datos y el color visible, quede orientada hacia el exterior y sea perfectamente legible desde fuera. Pegarla por dentro tiene una doble ventaja: protege la pegatina de las inclemencias del tiempo (sol intenso, lluvia, cambios de temperatura) que podrían deteriorarla y hacerla ilegible, y asegura que esté siempre visible y en la posición reglamentaria para su comprobación por parte de las autoridades.

Para las motocicletas y otros vehículos que no disponen de parabrisas delantero, la normativa es un poco más flexible, aunque igualmente clara en su objetivo. El reglamento indica que la pegatina de la ITV debe situarse en un lugar claramente visible del vehículo que permita su verificación sin dificultad. Esto puede ser el chasis, el carenado, o cualquier otra superficie rígida donde quede expuesta y no haya riesgo de que se desprenda o se dañe por el roce (por ejemplo, con la ropa o las piernas del conductor o pasajero). Lo crucial es que sea accesible a la vista para el agente que necesite comprobarla.

Una práctica muy común, aunque incorrecta y potencialmente sancionable, es la de ir acumulando las pegatinas de las sucesivas inspecciones de la ITV en el parabrisas. Si bien puede parecer una simple forma de coleccionar o mostrar el historial del vehículo, el Reglamento General de Vehículos establece que solo debe llevarse la pegatina correspondiente a la última inspección favorable vigente. Mantener pegatinas antiguas, especialmente si se acumulan en la zona reglamentaria, puede ser considerado una obstrucción de la visibilidad del conductor en la esquina superior derecha, lo cual puede derivar en una multa. Por lo tanto, al pasar una nueva ITV, lo recomendable es retirar la pegatina antigua antes de colocar la nueva.

Pasamos ahora al otro distintivo de gran relevancia en la actualidad: la etiqueta ambiental de la DGT. Esta pegatina clasifica a los vehículos en función de su potencial contaminante, basándose en las emisiones que generan. Su importancia ha crecido exponencialmente desde la implementación de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) en numerosas ciudades españolas. Desde el 1 de enero de 2023, todos los municipios de más de 50.000 habitantes en España están obligados a establecer una ZBE, y el acceso, circulación y estacionamiento dentro de estas zonas a menudo dependen de la clasificación ambiental del vehículo, identificada por esta etiqueta.

La colocación correcta del distintivo ambiental es igualmente crucial para evitar problemas. La Dirección General de Tráfico especifica que esta pegatina debe ubicarse en la esquina inferior derecha del parabrisas delantero del vehículo. Al igual que con la ITV, debe pegarse por la parte interior del cristal para que sea legible desde el exterior y esté protegida. La elección de la esquina inferior derecha no es casual; busca que la pegatina esté visible para las autoridades (que suelen verificarla al entrar en ZBE o en controles) sin obstaculizar el campo de visión del conductor en áreas críticas para la conducción segura. Es fundamental que no se coloque en un lugar que impida la visibilidad, y esto incluye no ponerla justo debajo o superpuesta a la pegatina de la ITV, ya que esta última ocupa la esquina superior derecha.

La posible multa por no llevar visible el distintivo ambiental, o por llevarlo mal colocado, puede ser de hasta 200 euros. La sanción no se impone tanto por no llevar la pegatina en sí (aunque en ZBE es prácticamente obligatoria para poder circular), sino por llevarla en un lugar que comprometa la visibilidad del conductor. Las autoridades interpretan que cualquier elemento adhesivo en el parabrisas que reduzca el campo visual reglamentario puede ser peligroso y, por tanto, sancionable.

En el caso de las motocicletas, al igual que con la ITV, la etiqueta ambiental debe colocarse en un lugar visible donde no obstaculice ni al conductor ni al vehículo en sí. Puede ser en el carenado, el chasis, o cualquier otra superficie que garantice su visibilidad desde el exterior y su protección. La clave sigue siendo la legibilidad para la comprobación por parte de las autoridades.

Para resumir las ubicaciones clave de estos dos distintivos:

Mantener estas pegatinas en su lugar correcto es una cuestión de cumplimiento normativo y de seguridad. Una correcta colocación facilita la labor de control de las autoridades y, lo más importante, asegura que nuestro campo de visión al volante no se vea reducido por elementos innecesarios o mal situados en el parabrisas.

A continuación, abordamos algunas preguntas frecuentes relacionadas con la colocación de estas pegatinas:

¿Por qué es obligatorio llevar estas pegatinas?
Es obligatorio para que las autoridades de tráfico puedan verificar de forma rápida y visual que el vehículo cumple con las inspecciones técnicas periódicas (ITV) y que está clasificado según su nivel de emisiones (Distintivo Ambiental), lo cual es crucial para el acceso a zonas restringidas como las ZBE. Es una herramienta de control para garantizar la seguridad vial y el respeto al medio ambiente.

¿Dónde exactamente debo colocar la pegatina de la ITV en un coche?
Debes colocarla en la esquina superior derecha del parabrisas delantero, vista desde el interior del vehículo. La parte impresa de la pegatina debe quedar hacia afuera para ser legible desde el exterior.

¿Y la pegatina ambiental de la DGT, dónde va?
Esta se coloca en la esquina inferior derecha del parabrisas delantero, también vista desde el interior. Debe estar legible desde el exterior y no debe obstaculizar la visibilidad del conductor ni superponerse a la pegatina de la ITV.

¿Puedo dejar pegatinas de ITV antiguas en el parabrisas?
No es recomendable y puede ser motivo de multa. El Reglamento General de Vehículos indica que solo debe llevarse la pegatina vigente. Acumular pegatinas antiguas puede reducir tu campo de visión y ser considerado una infracción.

¿Qué pasa si coloco mal una pegatina o no la llevo visible?
Puede ser sancionado con una multa. La cuantía puede variar, llegando hasta los 200 euros, especialmente si se considera que la colocación incorrecta obstaculiza la visibilidad del conductor, lo cual es un riesgo para la seguridad.

¿La colocación es diferente para motocicletas?
Sí, para motocicletas (y vehículos sin parabrisas) la normativa indica que deben colocarse en un lugar visible del vehículo, como el chasis o el carenado, asegurándose de que no se dañen y sean fácilmente comprobables por las autoridades.

¿Qué significan los colores de la pegatina de la ITV?
Los colores (verde, amarillo, rojo) indican el año en que caduca la inspección, siguiendo un ciclo de tres años. Esto ayuda a los agentes a identificar rápidamente vehículos cuya ITV podría estar caducada sin necesidad de acercarse a leer la fecha exacta.

En definitiva, la correcta colocación de las pegatinas obligatorias en tu vehículo no es un capricho, sino una parte esencial del cumplimiento de las normativas de tráfico y seguridad. Asegurar que la pegatina de la ITV y el Distintivo Ambiental de la DGT estén en su lugar designado en el parabrisas (o en un lugar visible en el caso de las motos) te ahorrará posibles multas y, lo que es más importante, garantizará que tu visibilidad al volante sea óptima en todo momento. Un pequeño gesto que contribuye a una conducción más segura y responsable para todos.

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